La Armada israelí ha emitido una orden a la embarcación humanitaria Madleen, instándola a cambiar de rumbo debido a su proximidad a una zona marítima restringida. Esta advertencia se produce en el contexto de la Flotilla de la Libertad, que se dirige a la Franja de Gaza con el objetivo de proporcionar asistencia humanitaria. Israel mantiene que el tráfico marítimo hacia Gaza está prohibido para embarcaciones no autorizadas, argumentando que la entrega de ayuda se lleva a cabo de manera regular a través de canales establecidos.
La situación se intensificó en la madrugada del lunes cuando la coalición Flotilla de la Libertad denunció que los tripulantes del Madleen, que incluyen a la activista ambiental Greta Thunberg, han sido «secuestrados» por las fuerzas israelíes. En un mensaje alarmante en redes sociales, la organización solicitó a la comunidad internacional que presione a sus respectivos ministerios de Asuntos Exteriores para asegurar la liberación de los activistas a bordo, mientras compartieron videos de los involucrados que expresaban su situación crítica.
Por su parte, Greta Thunberg, mientras se encontraba a bordo, emitió un potente mensaje de llamada a la acción, indicando que estaba siendo interceptada en aguas internacionales y pidiendo asistencia urgente. La situación ha generado preocupación entre los defensores de los derechos humanos, y la relatora de la ONU, Francesca Albanese, declaró que había perdido comunicación con la nave, demandando la intervención del gobierno británico para liberar a los voluntarios en el Madleen.
El Madleen zarpó de Sicilia con la intención de ayudar a la población de Gaza, que enfrenta severas condiciones debido al bloqueo. Sin embargo, las fuerzas israelíes reiteraron que cualquier intento de desafiar este bloqueo es considerado riesgoso e ilegal. A pesar de las advertencias recibidas, los activistas, incluido Sergio Toribio, han manifestado su determinación de continuar con su misión humanitaria y no dar la vuelta ante la presión ejercida por el ejército israelí.
El incidente ha reavivado el debate sobre el bloqueo de Gaza y las restricciones impuestas a las embarcaciones que intentan llevar ayuda humanitaria a la región. La comunidad internacional observa con atención, ya que situaciones similares en el pasado han tenido repercusiones significativas, tanto en términos de relaciones internacionales como en la respuesta de organizaciones humanitarias que buscan ayudar a los más necesitados en la zona.






